jueves, 6 de noviembre de 2014

La acreditación de la formación de las profesiones sanitarias

Los profesionales del área sanitaria se caracterizan por ser estudiantes de por vida. La razón para tanto estudio es estar actualizado sobre las novedades en su campo de actuación: desde nuevas enfermedades y los químicos para tratarlas hasta nuevos equipos de tratamiento o protocolos de actuación ante los pacientes. Las profesiones sanitarias abarcan: la medicina, la veterinaria, la farmacia, la odontología, la enfermería, la fisioterapia, la terapia ocupacional, la podología, la óptica y optometría, la logopedia y la nutrición humana y dietética.

En España la formación no reglada de los profesionales de la salud es regulada por la Comisión de Formación Continuada de las Profesiones Sanitarias adscrita al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y cada comunidad autónoma tiene su propio consejo que se encarga de la acreditación de dicha formación.

Para los profesionales en general y para los profesionales sanitarios en particular, es importante que la formación no reglada, bien sea presencial o virtual, cuente con la acreditación correspondiente ya que de esta manera los profesionales de la salud pueden demostrar su formación permanente para el correcto ejercicio de sus cargos.

Para acreditar una actividad de formación continuada se sigue el procedimiento mostrado en la siguiente figura.



Una vez verificado que la actividad propuesta es acreditable y cumple con los requerimientos establecidos se remite a tres evaluadores independientes, quienes evaluarán la solicitud de acuerdo con los criterios fundamentales establecidos por la comisión de formación continuada correspondiente. Estos criterios para la evaluación de las actividades de formación continuada incluyen un componente cualitativo y uno cuantitativo:

Criterios del componente cualitativo


La valoración de cada uno de los criterios que integran el componente cualitativo se normaliza utilizando una escala de Licker modificada.

Componente cuantitativo

El componente cuantitativo está basado en la duración de la actividad. Este componente puede ajustarse para ponderar el impacto sobre el número de créditos final de las actividades de muy larga duración.

Ponderación de los componentes cualitativo y cuantitativo

Componente cualitativo


Partiendo de la base de la importancia desigual que se concede a cada uno de los criterios en los que se basa el componente cualitativo, se utiliza un factor de ponderación en cada caso.
  • Objetivos de la actividad x 1.0
  • Organización y logística x 1.0
  • Pertinencia de la actividad x 2.0
  • Metodología docente x 1.5
  • Evaluación x 1.5

Componente cuantitativo


Con objeto de introducir un elemento de equilibrio en la puntuación final de la actividad se introduce un factor de ponderación escalonado en función de la duración de la actividad:
  • < 20 horas x 1,1
  • entre 21 y 40 horas x 1,0
  • entre 41 y 80 horas x 0,9
  • 80 horas x 0,7
El máximo número de horas es 100 para el cálculo del componente cuantitativo en cualquier actividad.

Una vez finalizado el proceso de evaluación si la actividad supera la evaluación cualitativa se comunica el número de créditos concedidos y las condiciones que deben cumplirse para su utilización.

Fuente:



martes, 2 de septiembre de 2014

La calidad de la formación virtual (II)

La formación virtual utiliza los recursos tecnológicos disponibles en Internet y es una alternativa de formación para las personas que no pueden acceder a los sistemas de formación reglada presenciales, para los profesionales que desean actualizar sus conocimientos y para todas aquellas personas que quieren aprender por su cuenta.


La formación virtual elimina las restricciones de tiempo y espacio y  la oferta disponible es abundante en todas las áreas de conocimiento. Entonces las preguntas, entre otras, son:


En el artículo anterior describimos los factores de calidad que aplica Asociación Española de Normalización y Certificación, AENOR para verificar la calidad de la formación virtual. En este artículo comentaremos cada factor, resaltando los criterios que puede utilizar un potencial usuario de una formación virtual.
Emplebilidad
Este factor es al que AENOR da más peso en la acreditación de la calidad de la formación virtual y representa el impacto de esta formación en la capacidad de integración al mercado laboral por parte del alumno o de mejorar en el puesto de trabajo existente. Toma en cuenta la demanda del mercado y el reconocimiento de la formación.
Los criterios de demanda establecen la importancia de la formación en relación con las necesidades del sector a la cual va dirigida. Para tener un buen nivel en este factor la formación debe:
  • estar basada en un estudio de mercado,
  • estar asociada a un compromiso de contratación para una parte o la mayoría de los egresados y
  • demostrar que la mayoría de los egresados de insertarán en el mercado laborar o mejorarán su situación actual.

Los criterios de reconocimiento de la formación están relacionados con el grado de aceptación y de prestigio que posee la formación de un suministrador específico, por el mercado laboral. El nivel de este criterio se establece por:
  • Los alumnos reciben un diploma de asistencia.
  • Se otorga un diploma a los alumnos que superan un examen de evaluación de los conocimientos adquiridos
  • El diploma es oficial o reconocido por el empleador
  • El diploma posee un prestigio internacional para los empleadores.

Facilidad de asimilación
Este factor tiene que ver con la capacidad de la acción formativa para estimular al usuario con el fin de entender los contenidos y favorecer el aprendizaje. Toma en cuenta la interactividad y la tutorización presentes en la formación virtual.
La interactividad es definida por AENOR como la capacidad para relacionarse de forma dinámica con los usuarios y los contenidos virtuales de la formación. Los criterios mejor valorados incluyen:
  • Plataforma de gestión aprendizaje interactiva
  • El uso de diferentes contenidos multimedia: animaciones, audio, vídeo, foros
  • La existencia y fácil acceso de materiales y documentación: guía de uso de la plataforma, guía didáctica de contenidos, contenidos académicos.
  • Aplicación práctica: la formación se reanuda en el punto donde se dejó la sesión anterior, existen ejercicios prácticos, el alumno establece su itinerario formativo.
  • Sistema de evaluación: la metodología de evaluación del alumno está explicada y documentada.
  • Los alumnos pueden evaluar todos los aspectos de la actividad de formación.

La tutorización permite dinamizar pedagógicamente cada curso y ayuda a los alumnos a interactuar con los docentes, con los contenidos y con otros alumnos. Incluye el conjunto de actividades dirigidas a motivar, asesorar, resolver dudas, supervisar y proporcionar orientación a los alumnos, encaminadas a optimizar el aprendizaje. Los niveles de este factor incluyen:
  • Tutoría reactiva mediante correo electrónico o retroalimentación del progreso.
  • Tutoría activa mediante chats o foros.
  • Compromiso de atención al alumno en un tiempo preestablecido casi inmediato.
  • Las pruebas de evaluación son comentadas por el tutor.

Accesibilidad
Este factor cuantifica en qué medida la formación virtual puede ser comprensible, utilizable y practicable con eficiencia y eficacia por cualquier persona. Está basado en la aplicación de normas internacionales de calidad asociadas al hardware, al software y a los contenidos web de la formación virtual.
Las normas asociadas a cada elemento son las siguientes.
UNE 39801:2003. Aplicaciones informáticas para personas discapacitadas. Requisitos de accesibilidad al ordenador. Hardware.
Establece las características que han de incorporar los componentes físicos de los ordenadores (su hardware) y la documentación asociada, para que puedan ser utilizados por la mayor parte de las personas, incluyendo personas con discapacidad y personas de edad avanzada, y en cualquier entono (hogar, formación, trabajo, etc.), de forma autónoma o mediante las ayudas técnicas pertinentes.
UNE 39802:2003. Aplicaciones informáticas para personas discapacitadas. Requisitos de accesibilidad al ordenador. Software.
Establece las características que ha de cumplir el software de un ordenador, incluyendo su entorno operativo (sistema operativo más la interfaz de usuario asociada), las aplicaciones informáticas y la documentación asociada, para que puedan ser utilizados por la mayor parte de las personas, incluyendo personas con discapacidad y personas de edad avanzada, de forma autónoma o mediante las ayudas técnicas pertinentes.
UNE 39803:2003. Aplicaciones informáticas para personas discapacitadas. Requisitos de accesibilidad para contenidos en la Web
Establece las características que han de cumplir los contenidos disponibles mediante tecnología Web en Internet, Intranets y otro tipo de redes, para que puedan ser utilizados por la mayor parte de las personas, incluyendo personas con discapacidad y personas de edad avanzada, de forma autónoma o mediante las ayudas técnicas pertinentes.de forma autónoma o mediante las ayudas técnicas pertinentes.
En resumen cuando quieras hacer un curso virtual de calidad verifica lo siguiente:
  • El curso te permitirá mejorar tu situación de trabajo actual o facilitará tu búsqueda de un nuevo trabajo.
  • Recibirás un diploma con las acreditaciones requeridas por tu empleador o con reconocimiento institucional de calidad.
  • El curso se imparte en una plataforma interactiva con acceso a los materiales virtuales, a los compañeros de clase y a los tutores.
  • La tutorización implica una retroalimentación continua por parte del tutor.
  • El hardware, el software y los contenidos del curso son accesibles.


Artículos consultados
  1. Calidad de la formación Online. Norma UNE 66181. CONGRESO INTERNACIONAL DE ACCESIBILIDAD WEB SIDAR 2010. 20 – 22 de Octubre de 2010. http://introduccionalastic.files.wordpress.com/2011/04/calidad_de_la_formacion_online.pdf
  2. José Ramón Hilera González. UNE 66181:2008, el primer estándar sobre calidad de la formación virtual. RED, Revista de Educación a Distancia. Número monográfico VII.- 30 de Diciembre de 2008. Número especial dedicado a la evaluación de la calidad en entornos virtuales de aprendizaje. http://www.um.es/ead/red/M7/

jueves, 7 de agosto de 2014

La calidad de la formación virtual (I)

La demanda de formación virtual está en constante aumento debido, entre otras razones, a nuevas necesidades de formación, desarrollo de planes de formación continua en las empresas, poca disponibilidad de tiempo de parte de los usuarios, dificultades de desplazamiento para atender cursos presenciales y el potente y exponencial desarrollo de las tecnologías de información y comunicación, especialmente a través de Internet.

De acuerdo con datos de la Asociación Española de Normalización y Certificación, AENOR (http://www.aenor.es), más del 10% de la formación en España es virtual o mixta con un crecimiento interanual del 30%. AENOR estima que las principales barreras que frenan el crecimiento de esta actividad son: la tecnología poco conocida, los desajustes entre la oferta y las necesidades, la calidad de los contenidos, las fuentes de suministro desconocidas, la información sobre la oferta, la adecuación del servicio, el reconocimiento de las titulaciones y la accesibilidad para personas con discapacidad. Estos factores crean desconfianza y se imponen como una barrera para que las personas decidan formarse de forma virtual (1).


Para colaborar con las empresas y los usuarios AENOR ha publicado en España la norma UNE 66181 que es el primer estándar en el ámbito de la gestión de la calidad de la enseñanza virtual. Este estándar pretende ser una guía para identificar las características de las acciones formativas virtuales, de forma que los compradores de formación virtual puedan seleccionar los productos que mejor se adapten a sus necesidades y expectativas, y para que los suministradores puedan mejorar su oferta y con ello la satisfacción de sus clientes o alumnos (2). El modelo de calidad establecido por este estándar se basa en el ciclo de satisfacción de las necesidades y expectativas de los clientes representado en la siguiente figura:


Ciclo de la satisfacción de las necesidades y expectativas de los clientes de la formación virtual 
(AENOR, 2008).

El estándar abarca las acciones formativas destinadas a la incorporación al mercado laboral y para mejorar la condición laboral y excluye la enseñanza reglada. Es de uso voluntario y tiene por objeto aumentar la transparencia y confianza del mercado. La norma define la formación virtual como aquella basada en el uso de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y que fundamentalmente es no presencial. Se clasifica en tres tipos:

Autoformación: formación virtual sin tutorización, basada en el autoaprendizaje.
Teleformación o formación en línea: formación virtual con tutorización.
Formación Mixta: formación virtual que contiene sesiones presenciales.

Para cuantificar en qué grado se satisfacen las necesidades y expectativas de clientes y alumnos, se han establecido cuatro factores de satisfacción críticos: (a) Información, establece un conjunto mínimo de datos que han de suministrarse al cliente en la oferta de cualquier acción formativa; (b) Empleabilidad, representa en qué medida la formación virtual incrementa la capacidad del alumno de integrarse en el mercado laboral o de mejorar su posición en su trabajo actual; (c) Facilidad de asimilación, o capacidad de la acción formativa virtual para estimular al usuario con el fin de entender los contenidos y favorecer el aprendizaje; y (d) Accesibilidad, factor que trata de cuantificar en qué medida la formación virtual puede ser comprensible, utilizable y practicable con eficiencia y eficacia por cualquier persona (2). La siguiente figura resume los parámetros de satisfacción de cada factor.




Cada factor tiene hasta 5 niveles de valoración desde INICIAL a EXCELENTE. Para alcanzar un nivel se deben cumplir todos los requisitos especificados en él y en todos los anteriores, si los hubiera. Una vez evaluados todos los factores los resultados se resumen en una tabla que muestra los factores de satisfacción y los niveles de calidad alcanzados. Para obtener la certificación la puntuación mínima es la siguiente:


Valores mínimos requeridos para los factores de calidad (AENOR, 2008).


En la próxima entrega detallaremos los factores de calidad descritos en este artículo para proporcionar los criterios a seguir a la hora de seleccionar una formación virtual.

Artículos consultados


(1)   Calidad de la formación Online. Norma UNE 66181. CONGRESO INTERNACIONAL DE ACCESIBILIDAD WEB SIDAR 2010. 20 – 22 de Octubre de 2010. http://introduccionalastic.files.wordpress.com/2011/04/calidad_de_la_formacion_online.pdf

(2)   José Ramón Hilera González. UNE 66181:2008, el primer estándar sobre calidad de la formación virtual. RED, Revista de Educación a Distancia. Número monográfico VII.- 30 de Diciembre de 2008. Número especial dedicado a la evaluación de la calidad en entornos virtuales de aprendizaje. http://www.um.es/ead/red/M7/

jueves, 26 de septiembre de 2013

Formación y especialización en veterinaria

En el estudio “Diagnóstico y Plan Estratégico de la Profesión Veterinaria” (2008), desarrollado para la Organización Colegial Veterinaria Española, se establece como uno de los mayores retos para los profesionales de la veterinaria el exceso de oferta (elevado número de licenciados) y que la falta de especialización de los veterinarios, relacionada en cierto modo con algunas carencias formativas, ha permitido a otros profesionales tomar posiciones en algunos campos tradicionalmente vinculados con la profesión veterinaria, agravando aún más el exceso de oferta. 

Los expertos consultados para el estudio coincidieron en que uno de los retos de los veterinarios es la formación y la especialización ya que la oferta de veterinarios es indiferenciada, y se ha centrado en algunos ámbitos, dejando otros de lado. También incluyeron en los retos la formación en el ámbito de la gestión empresarial. El estudio indica que la formación universitaria en Veterinaria tiende a estar más inclinada hacia la clínica veterinaria, que es también la orientación de muchos de los estudiantes en el momento de ingresar en la Facultad y que los licenciados no tienen un perfil específico que delimite u oriente su ámbito de actividad profesional. Todos los licenciados son aptos para todos los campos.

El estudio concluye que las carencias formativas de los veterinarios son el origen de diversos problemas para la profesión. La solución a este problema es la promoción o incluso prestación de servicios de formación para los veterinarios. El grado de consenso en torno a la necesidad de especialización en la profesión se sitúa alrededor del 90% en todos los grupos de veterinarios, independientemente de la duración de su trayectoria laboral. Para todos ellos el futuro de la profesión pasa, entre otras cosas, por la especialización de los veterinarios. Esta solución se plantea a tres niveles:

Fuente: “Diagnóstico y Plan Estratégico de la Profesión Veterinaria” (OCVE-2008).

En resumen los requisitos de formación de los veterinarios son:
  • Temas de especialización actualizada diferenciados de la oferta formal (formación universitaria) y no formal (cursos presenciales y online).
  • Contenidos de alta calidad y autores de reconocido prestigio nacional e internacional.
  • Contenidos útiles para su desarrollo profesional, de vanguardia e innovadores. 
  • Cursos certificados por la autoridad de formación continuada competente.
  • Formación tutorizada por expertos.
  • Flexibilidad en la distribución del tiempo para la formación.

Para leer el estudio consulte aquí: Parte I y Parte II.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Participar, la clave del éxito

De acuerdo con los expertos las claves para tener éxito en un curso online, desde la perspectiva del alumno, son: contenidos estructurados, espacios de participación y tutores motivadores. La relación entre estos aspectos y los resultados obtenidos por los alumnos está bien documentada en la literatura científica y aunque parezca obvio inciden de manera positiva en los resultados. Pero... sí, hay un pero. De nada vale que el curso online tenga unos contenidos alucinantes, un diseño instrucional perfecto, herramientas de comunicación y participación de última generación y tutores "cheer leaders" si los alumnos no participan.



La clave, en mi experiencia, es que el alumno se involucre tanto como se lo permita el tiempo de dedicación al curso y comente sobre los contenidos que recibe, las opiniones del tutor y de sus compañeros, los cuestionarios, su experiencia profesional y especialmente sobre su experiencia como estudiante online. El estudio a través de Internet puede resultar solitario, para sentirse menos sólo hay que crear vínculos sociales con el grupo de estudio. Una de las cosas que más me entretiene al leer artículos en Internet son los comentarios de las personas. Enriquecen el artículo, ofrecen perspectivas distintas del tema tratado, son divertidos y en fin se conoce gente!


Si eliges hacer un curso por Internet te recomiendo que participes. Me encantaría conocer qué te motiva a o qué te inhibe de participar en los foros de debate de los cursos que has hecho (¡o que piensas hacer!). En mi experiencia estas son algunas de las razones para participar:
  • Compartir mi experiencia.
  • Aprender de la experiencia de otros.
  • Conocer gente nueva.
Y entre las razones más populares para no participar están:
  • Miedo "escénico" o temor de hablar en público.
  • No valorar mi aportación al tema (lo que digo o pienso no es tan interesante).
  • Miedo a lo que los demás piensen de lo que digo.
¿Estas son tus razones? ¿Tienes otras que no están en la lista? ¡Cuéntamelo todo! ¡Participa!

Referencias
  • Gotthardt M, Siegert MJ, Schlieck A, Schneider S, Kohnert A, Gross MW, et al. How to successfully implement E-learning for both students and teachers. Acad Radiol. 2006 MAR;13(3):379-90.
  • McKimm J, Jollie C, Cantillon P. ABC of learning and teaching - web based learning. Br Med J. 2003 APR 19;326(7394):870-3.
  • Wong G, Greenhalgh T, Russell J, Boynton P, Toon P. Putting your course on the web: Lessons from a case study and systematic literature review. Med Educ. 2003 NOV;37(11):1020-3.
  • Kay RH. Developing a comprehensive metric for assessing discussion board effectiveness. British Journal of Educational Technology. 2006 SEP;37(5):761-83.
  • Chan AY, Chow PKO, Cheung KS. Student participation index: Student assessment in online courses. Advances in Web-Based Learning - Icwl 2004. 2004;3143:449-56.